Anteriormente hemos señalado que a lo largo de la historia, se han producido cambios culturales a raíz de la acción del ser humano cuando este busca realizar sus necesidades y mencionamos la propuesta de Manfred Max-Neef para clasificar las mismas: subsistencia, protección, afecto, entendimiento, participación, ocio, creación, identidad y libertad.
Analizar el concepto de necesidad nos sirvió para aportar una perspectiva diferente a la habitual en torno a esta idea. Hablamos de la necesidad como algo a vivir, a realizar, a experimentar. Un recurso para la movilización personal y colectiva, que nos sitúa en una posición de responsabilidad, frente a la actitud de pasividad que promueve la perspectiva de que las necesidades son algo a satisfacer. Nuestra propuesta es que cada uno se comprometa, vinculándose al mismo tiempo a otras personas, con la realización de su creación, de su libertad, de su ocio, de su identidad…
Las necesidades son, al mismo tiempo, el espacio en el que las personas podemos encontrar nuestro nexo de unión, nuestra vía para el entendimiento mutuo, para el desarrollo de proyectos colectivos, para solucionar conflictos interpersonales. En especial, cuando entendemos un sistema sin jerarquías, en el que el proceso de satisfacción de necesidades se caracteriza por la simultaneidad, la complementariedad y la compensación (precisamente aquí los postulados de Max-Neef se diferencian de los de Maslow).
Las necesidades como principal motor de la conducta humana, son algo común a todos los seres humanos, y los satisfactores (las acciones, conductas, ideas, perspectivas, estructuras que creamos,…), son los que varían a lo largo de la historia, de las culturas, del tiempo.
Así mismo, un grupo que cree las condiciones para que todas las personas puedan realizar sus necesidades estará dotando de significado la desgastada palabra democracia.
Para conocer más sobre este genial pensador te recomendamos la lectura: “¿Qué puede enseñarnos el Desarrollo a escala humana de Max-Neef sobre la pobreza?” de Catherine Shen (en inglés).