¡Que levanten la mano todas las personas que han oído este palabro antes!


Quino

Para los que aún no habéis descubierto este concepto, vamos a contaros un poco en qué consiste la etnoeducación.

Para empezar, diremos que se trata del derecho a que la propia historia y la propia cultura de toda etnia sean valoradas: como fuentes de conocimiento, de creación, pensamiento y sabiduría y, por lo tanto, como instrumento apto para educar a quienes se identifican con dichos valores u optan por los mismos. (De la Torre, 2007)

En consecuencia para hablar correctamente de Etnoeducación, hay que partir del hecho de que ella, por definición, no es un derecho que se reivindique sólo para las etnias minoritarias de una nación, sino que es un derecho que pertenece a todo grupo humano (blancos, mestizos, mulatos, negros, indios etc.).

  • Enfocada a grupos o comunidades que posee una cultura, lengua y tradiciones distintas pero que sean parte dentro del territorio nacional.
  • Debe estar relacionada con el proceso social, productivo y cultural con el respeto a sus creencias y tradiciones dentro del ambiente donde se genera.
  • Su importancia es de posicionar la educación intercultural en todas las escuelas tanto públicas como privadas, para que los estudiantes y las familias entiendan las diferentes culturas existen en un país de tal forma que se reconozca y respete las diversidad cultural.

Tal y como explica Cristián Muñoz, la propuesta de la Etnoeducación quiere ir más allá de la necesidad por conocer rasgos característicos de los indígenas; y tampoco quiere limitarse a una pedagogía dirigida exclusivamente a las comunidades étnicas. Lo etnoeducativo intenta generar un espacio pedagógico y educativo que posibilite el dialogo intercultural entre el mundo indígena y el no indígena, donde las lenguas y costumbres, saberes y prácticas del mestizo y el indígena se encuentren para desarrollar acciones interculturales en las sociedades contemporáneas.

Por lo tanto, debe ser entendida como una herramienta para la emancipación y toma de conciencia porque permite repensar los patrones culturales y las estructuras sociales existentes.

En definitiva, la etnoeducación busca promover acciones que posibiliten reproducir socialmente la capacidad de conocimiento, sabiduría y ciencia existente en el acervo ancestral de las culturas originarias. Este elemento es el que le da a toda etnia la posibilidad de ser valorada y tenida en cuenta como productora de pensamiento.

Te dejamos dos reflexiones sobre la experiencia de la etnoeducación en Colombia: